viernes, 6 de mayo de 2011

querida

Querida... este corazón no quiere lo que mi razón desea con ansias. El dulce descanso del olvido.

Si. juego a ser fría e indiferente... Si. No tengo palabras para ti... Pero no es porque sea fría e indiferente ni que ya esté todo superado, es porque no se que decir en una situación así.

Querida... aún quiero lo mismo de antes, los mismos sueños, la misma compañera en esos sueños. Y siento el vacío en el pecho cada vez que los recuerdo.

Querida... tu sabes lo que siento. Pero también sé que esto tenía que ser así.

Quiero amarte con la locura del que no tiene miedo a nada, pero querida mía... Si. Tengo miedo.
Si. Quisiera jugar alguna ultima carta, pero por hoy, mis argumentos son demasiado débiles.

Y por último querida mujer de mi corazón... te extraño como sólo se extrañan las cosas inalcanzables.

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